martes, 6 de diciembre de 2016

Bill Viola

Bill Viola (1951) es ampliamente reconocido como uno de los principales artistas de vídeoarte  internacional. Fue el pionero del videoarte desde los años sesenta, como artista contemporáneo, utiliza la alta tecnología en sus trabajos, pero siempre en conexión con la historia y el pasado y en especial con el Renacimiento y sus movimientos artísticos.

Durante más de 30 años ha creado vídeos, vídeo instalaciones arquitectónicos, entornos de sonido, actuaciones musicales electrónicas, y obras que se emitieron en televisión. Los videoartes de Viola están creados en ambientes que envuelven al espectador con la imagen y el sonido, empleando tecnologías de última generación y se distinguen por su precisión y simplicidad directa.                                                               
Sus obras de vídeo han sido emitidas y presentadas cinematográficamente en todo el mundo, mientras que sus escritos han sido publicados en antologías y para los lectores internacionales.
Sus trabajos se centran en experiencias de la natalidad humana, la muerte, el desarrollo de la conciencia y tienen raíces tanto en el arte oriental y occidental, así como las tradiciones espirituales, incluyendo el budismo zen, el sufismo islámico, y la mística cristiana.

Viola recibió su BFA en Estudios Experimentales de la Universidad de Syracuse en 1973. Desde entonces, ha creado más de 150 obras que se han mostrado en los museos, galerías, festivales de cine, y en la televisión pública en todo el mundo. 



Bill Viola. Las Pasiones

El artista experimenta con las imágenes para retratar los estados emocionales y los cambios en los sentimientos en "Las pasiones”.

El vídeo permite a Viola mostrar con mayor intensidad y a partir de la ralentización de las imágenes las expresiones cambiantes, la inquietud prolongada de caras y cuerpos. 
Viola establece un lenguaje básico para formular el dolor, la angustia, la incertidumbre, el recuerdo o la sorpresa; una gramática de las emociones que interpela y atrae al espectador. Los actores aparecen vestidos de calle, como si quisieran sugerir que las pasiones extremas de la Biblia se pueden producir entre nosotros. 



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